El principal objetivo es combatir el fraude con tecnología dual ya que se calcula que el mercado del arte pierde $10 mil millones anuales por falsificaciones (*según Art Loss Register*). Mientras INGOT protege las obras físicamente, TokenizArt garantiza su integridad digital. Por ejemplo, una escultura valuada en millones puede custodiarse en una bóveda de INGOT y, al mismo tiempo, tokenizarse para ser fraccionada y vendida a inversores globales sin moverla de su ubicación.
Juan Piantoni, CEO de INGOT y Presidente de CAESACS (Cámara Argentina de Empresas de Servicio de Alquiler de Cajas de Seguridad), expresó «Esta alianza no es solo tecnológica, es cultural. Estamos uniendo siglos de expertise en custodia física con la innovación que el arte necesita para seguir siendo relevante en la era digital«.
Ambos mundos se complementan perfectamente ya que INGOT ofrece bóvedas certificadas contra robos, incendios y desastres ambientales y sus instalaciones son referencia en Latinoamérica para museos, coleccionistas privados e instituciones y TokenizArt utiliza tecnología blockchain (Gnosis Chain, carbono-neutral) y chips NFC para crear un «gemelo digital» inviolable de cada obra, registrando su procedencia, autenticidad y movimientos.
Es su DNI digital, no es solo un certificado, es un registro en la blockchain que guarda toda la historia de la obra, de forma permanente y que es imposible de alterar. Asegura la autenticidad y la trazabilidad para siempre. Se adhiere un chip NFC a la propia obra que es el puente entre la obra física y su gemelo digital. Es seguro, no se puede clonar y vincula la pieza física que está en la bóveda de Ingot con su registro digital en la blockchain de Tokenizart.
Leonardo Leporace, CEO y Co Fundador de TokenizArt, comentó “Esta alianza es una innovación para coleccionistas e Instituciones ya que las obras almacenadas en INGOT se pueden tokenizar para usarse como colaterales en préstamos o para ventas fraccionadas, ampliando oportunidades de inversión. La confianza en INGOT nos permite escalar soluciones que, hasta hoy, eran ciencia ficción: obras custodiadas en bóvedas inexpugnables pero accesibles digitalmente para todo el mundo”.
Ambas empresas lanzaron un proyecto donde coleccionistas tokenizarán obras custodiadas en INGOT, con acceso a un mercado global de compradores y co-lanzarán talleres sobre preservación física-digital de patrimonio, posicionándose como referentes en RSE.
Además, lanzaron un modelo innovador de mecenazgo inclusivo. Bajo la premisa de que todos “podemos ser mecenas”, INGOT, como líder en custodia física de obras de arte, facilita la custodia segura y la democratización del arte y amplía su compromiso con la cultura al adoptar el “micro-mecenazgo digital de TokenizArt”, transformando su rol de custodio en un aliado estratégico para artistas emergentes. Al poder comprar solo una fracción, un token, la inversión en arte de alto valor se vuelve accesible ya no es solo para grandes coleccionistas o fondos, también puede ayudar a artistas, sobre todo emergentes que podrían financiarse vendiendo tokens de sus futuras obras.
El acuerdo no solo protege obras, sino que las integra a la economía real mediante herramientas blockchain, democratizando el acceso al arte y redefiniendo el mecenazgo tradicional. Cada obra custodiada en sus bóvedas genera un “gemelo digital” con trazabilidad blockchain, facilitando su venta global sin moverla físicamente.
Durante el año además realizarán acciones y campañas como exposiciones físicas en galerías asociadas y subastas digitales, alianzas estratégicas con museos y fundaciones, entre otras colaboraciones con empresas y artistas.
Con esta alianza se está logrando darle liquidez y seguridad a un mercado que lo necesitaba. Se está desbloqueando el valor real de los activos físicos. Los hacen más líquidos, más seguros y además los convierten en instrumentos financieros viables gracias a esa combinación de custodia de élite y registro distribuido.