Con la reciente aprobación de la modificación a la Ley 19.628 en Chile y la creación de la Agencia Nacional de Protección de Datos Personales, el país da un paso importante hacia la inclusión financiera. Un hito que vale la pena destacar este 28 de enero, Día Internacional de la Protección de Datos, ya que complementa el sistema informativo que, por el momento, está basado únicamente en datos negativos.
La nueva Ley de Protección de Datos Personales permitirá a los ciudadanos construir un historial de crédito más completo y equilibrado. Además, posibilitará el registro no solo de datos negativos, sino también de datos positivos, como pagos puntuales y manejo responsable del crédito. Esto facilita una evaluación más justa y holística del comportamiento crediticio, aumentando las oportunidades de acceder a financiamiento en mejores condiciones y promoviendo una cultura de responsabilidad financiera.
La incorporación de información positiva en los historiales crediticios permitirá a más personas acceder a productos financieros en mejores condiciones, beneficiando especialmente a aquellos con ingresos bajos o sin historial crediticio previo. Los prestamistas podrán evaluar el comportamiento crediticio de manera completa, evaluando tanto los pagos puntuales como los incumplimientos, reduciendo así el riesgo de exclusión financiera por eventos negativos aislados. Además, al incluir información positiva, se incentiva a los individuos a mantener un buen comportamiento financiero, ya que esto se reflejará en su historial y les permitirá acceder a mejores oportunidades y productos de crédito.
La llegada de la información positiva ha impactado a otros países de la región. Por ejemplo, para el caso de Brasil, ha sido un hito crucial para la inclusión financiera en el país. Este sistema ha permitido una disminución significativa del riesgo de crédito para personas naturales, con un 41% de las personas físicas registradas migrando a bandas asociadas con menor riesgo crediticio. Esto ha facilitado que más personas accedan a mejores condiciones de crédito, promoviendo una mayor estabilidad financiera.
El impacto de la información positiva no solo se refleja en la inclusión financiera, sino también en la toma de decisiones de crédito. Con datos más completos y precisos, las instituciones pueden evaluar mejor el comportamiento crediticio de los individuos, reduciendo el riesgo de impagos y permitiendo una asignación más eficiente de recursos. Esto, a su vez, fomenta un entorno crediticio más justo y accesible para todos.
“La evidencia internacional respalda que un marco normativo adecuado de la información de crédito favorece considerablemente la democratización del crédito y la inclusión financiera. La experiencia nos muestra que la llegada de la información positiva a Chile marcará un antes y un después respecto al acceso y evaluación de crédito de todos.” resalta Ingrid Barahona, Chief Data Officer & Innovation de Experian.
Principales impactos de la data positiva
- Permite ajustar el monto del crédito según la capacidad de pago del solicitante, lo que reduce el riesgo de no pago, facilitando el proceso de préstamo.
- Identifica a aquellas personas que, a pesar de haber incumplido obligaciones en el pasado, son buenos candidatos para crédito.
- Beneficia al solicitante del crédito, ya que puede acceder a condiciones que se alinean con su verdadera situación financiera.
- Reduce los riesgos de sobreendeudamiento y favorece el cumplimiento de las obligaciones crediticias.
- Incentiva un comportamiento de pago responsable, ya que el cumplimiento oportuno de las obligaciones crediticias puede ser reconocido positivamente al buscar nuevas oportunidades de financiamiento en el futuro.